Curiosidades sobre el jengibre

El jengibre y su uso versátil en la cocina

El jengibre, conocido científicamente como Zingiber officinale, es una planta con flores originaria del sudeste asiático. Pertenece a la familia de las Zingiberáceas, a la que también pertenecen la cúrcuma y el cardamomo. Esta hierba perenne tiene un sabor picante característico y un aroma penetrante que la convierten en un ingrediente popular tanto en platos dulces como salados. Su sabor puede variar de suave y ligeramente dulce a picante y especiado, dependiendo de su madurez y de cómo se utilice.

 

Conociendo su orígenes

Esta maravillosa raíz tiene una rica historia que se remonta a más de 5,000 años. Originalmente se cultivaba en la antigua China y más tarde se extendió a la India, Oriente Próximo y, finalmente, a Europa. Desempeñó un papel importante en el comercio y la exploración, y exploradores famosos como Marco Polo y Cristóbal Colón lo introdujeron en nuevas regiones.

Cultivo de jengibre

 

Beneficios nutricionales

El jengibre no es sólo una sabrosa especia, sino también una fuente de nutrientes. Contiene vitaminas y minerales esenciales, como vitamina C, vitamina B6, potasio y magnesio. Además, es rico en antioxidantes y compuestos antiinflamatorios, que contribuyen a sus potenciales beneficios para la salud.

 

El jengibre en la cocina asiática

Las cocinas asiáticas, sobre todo las de China, Japón, Tailandia y la India, incorporan mucho jengibre en sus platos tradicionales. En la cocina china, este es un ingrediente clave en salteados, sopas y salsas, a los que añade un sabor refrescante y picante. También se utiliza en la fitoterapia china por sus propiedades caloríficas y circulatorias.

En la cocina japonesa, se utiliza encurtido, conocido como “gari“, se sirve a menudo con el sushi para limpiar el paladar entre bocado y bocado. El jengibre es también un ingrediente habitual de la sopa de miso y de diversos adobos. En la cocina tailandesa, es un ingrediente básico del curry, los salteados y las sopas, y aporta a los platos un sutil sabor picante y un perfil aromático.

En la India, ocupa un lugar importante en la cocina y la medicina ayurvédicas. Es un componente clave de mezclas de especias como el garam masala y el curry en polvo. Se utiliza tanto en platos dulces como salados, desde el chai (té) de jengibre hasta el curry y los chutneys con jengibre.

El jengibre en la cocina asiática

 

 

El jengibre en la cocina occidental

Aunque este ingrediente tiene una larga historia en la cocina asiática, también ha dejado su huella en la cocina occidental. En la cocina occidental, ya que se utiliza tanto en preparaciones dulces como saladas. Aporta un delicioso calor y profundidad de sabor a platos como las galletas de jengibre, el ginger ale y los caramelos de jengibre. En platos salados, el jengibre se utiliza a menudo en adobos para carnes, glaseados para verduras y aliños para ensaladas.

 

Cocinar con jengibre

El jengibre puede realzar el sabor de varios platos, añadiendo un toque agradable y aromático. Combina bien con ingredientes como el ajo, la salsa de soja, los cítricos y hierbas como el cilantro y la menta. Aquí tienes algunas ideas para incorporar el jengibre a tu cocina:

  • Añada jengibre fresco rallado a los salteados para darles un sabor vibrante y picante.
  • Añada jengibre a sopas y caldos para darles profundidad y calidez.
  • Use jengibre en adobos para carnes, mariscos o tofu para ablandar y realzar el sabor.
  • Incorpore jengibre a los aliños de ensaladas y vinagretas para darles un toque ácido y aromático.

Experimente con el jengibre en productos horneados como pasteles, magdalenas y galletas para obtener un sabor picante y reconfortante.

 

Cocinar con jengibre

 

 

Fáciles recetas de comida con jengibre

  • Salteado de pollo al jengibre: Saltea pechuga de pollo en rodajas con jengibre, ajo y verduras en una sabrosa salsa para una comida rápida y deliciosa.
  • Batido de jengibre y cúrcuma: Mezcla jengibre fresco, cúrcuma, piña y leche de coco para obtener un batido refrescante y saludable repleto de propiedades antiinflamatorias.
  • Salmón glaseado con soja y jengibre: Marina los filetes de salmón en una mezcla de jengibre, salsa de soja, miel y ajo, y luego hornéalos o ásalos para obtener un plato suculento y sabroso.
  • Sopa de zanahoria y jengibre: Hierve a fuego lento zanahorias, jengibre, cebollas y caldo de verduras hasta que estén tiernas, luego licúa hasta obtener una sopa reconfortante y nutritiva.
  • Salsa de mango y jengibre: Combina mango cortado en dados, cebolla roja, jalapeño, zumo de lima y jengibre fresco rallado para obtener una salsa vibrante y ácida que combina bien con carnes a la parrilla o como aderezo para tacos.

El jengibre es una especia extraordinaria que añade profundidad, sabor y aroma a una gran variedad de platos. Ya se utilice en la cocina asiática, india u occidental, su versatilidad brilla con luz propia. Desde sus orígenes ancestrales hasta su uso en la medicina tradicional, el jengibre ha captado la atención y las papilas gustativas de personas de todo el mundo. Así que, la próxima vez que esté en la cocina, no olvide echar mano de este maravilloso rizoma y explorar las infinitas posibilidades que ofrece.

 


Lee más: La albahaca: la hierba más versátil para cocinar